El apoyo a Ucrania con más armas obliga a Bruselas a realizar una intensa labor de pedagogía política
Las declaraciones del presidente Emmanuel Macron planteando como futurible el envío de soldados a Ucrania para ganar la guerra han sido rápidamente contestadas. Alemania, Reino Unido, Suecia, Polonia, Hungría, República Checa, Italia y España han rechazado esta fórmula. La propuesta no es viable porque la ayuda a Ucrania siempre ha estado condicionada a no dar pasos que impliquen escalar el conflicto a una guerra entre Rusia y los aliados.
Dado que la guerra de Rusia contra Ucrania ha modificado la estructura de seguridad europea ello requiere también un esfuerzo urgente desde la Unión para fortalecer su capacidad de respuesta en los términos que impone un mundo hostil. Hacerlo exige perfeccionar su autonomía estratégica generando nuevas capacidades, sin que ello reste esfuerzos al compromiso de los Estados con las estructuras de defensa como la OTAN que es hoy quien tiene el poder de disuasión.